Películas coreanas recomendadas del Siglo XXI

Películas coreanas

Empiezo mencionando Old Boy (2003) y la trilogía de la venganza para quitarme la recomendación más previsible y esperada por los fans del cine coreano, porque, si bien me gusta, no está entre mis películas coreanas favoritas. Por suerte para los seguidores de Park Chan-wook, sí que he incluido otras obras del famoso director, del que espero con bastante interés El simpatizante, una miniserie de HBO Max producida (y multiprotagonizada) por Robert Downey Jr. prevista para el 2024.

Dicho esto, me gustaría pensar en la existencia de este post como excusa para recomendar películas coreanas de diversos géneros. Es obvio que destacan los thrillers, donde los coreanos demostraron ser los líderes durante aproximadamente los primeros 10 años del Siglo XXI, pero también hay alguna que otra película romántica, comedias y auténticos dramas de diversa índole.

Todas de interés porque, además de servirnos para conocer otra forma de contar historias, también nos permiten conocer una cultura o forma de vida ligeramente diferente a la occidental, aunque con muchas similitudes. Supongo que por aquello de ser un país ultracapitalista y, al mismo tiempo, megaproteccionista de lo suyo, que pone a los policías y otros cuerpos y fuerzas del Estado en una posición un tanto regulera. Eso sí, si hablamos de venganza, los surcoreanos son los mejores.

Por otro lado, me gustaría mencionar al actor Song Kang-ho, de cuya filmografía podría yo hacer una extrapolación que lo equiparara con carreras y actuaciones emblemáticas como las de Robert DeNiro o Al Pacino a lo largo de los mejores años de sus respectivas carreras.

¡Vamos allá!

Escena de Old Boy (2003)

Las 18 mejores películas coreanas que he visto entre 2001 y 2023

Las 18 mejores películas coreanas

A pesar de basar el orden en mis propios gustos (aunque en las notas de FilmAffinity no estén actualizadas para no perder la fecha en que las vi originalmente), he optado por resumir las opiniones más generalizadas de cada una de las películas que ves en la imagen, con algún que otro apunte personal.

De muchas de estas películas ya he hablado en otros artículos, por los que, para evitar repertirme, aquí te expongo algunos de los puntos fuertes, ligeros spoilers y muchas escenas emblemáticas de cada una de ellas.

La doncella (The Handmaiden) (2016), de Park Chan-wook

Escena de La doncella (The Handmaiden) (2016)

Empiezo por La doncella (The Handmaiden), la película dirigida por Park Chan-wook y estrenada originalmente en 2016. Una obra audiovisual tan completa que, como ya he dicho alguna vez antes, podría haber ganado todos los premios importantes de los Oscar antes de la aparición de Parásitos (2019).

Como acercamiento a las relaciones lésbicas con trasfondo feminista, la representación de mujeres fuertes e independientes –a pesar de las circunstancias– que desafían las normas sociales es uno de los elementos más destacados de la película. La trama, llena de giros y sorpresas, destaca especialmente por ser contada con una narrativa refrescante y empoderadora.

Escena de La doncella (The Handmaiden) (2016)

De hecho, para mí solo hay una cosa que supere la cinematografía y la narración visual de La doncella (The Handmaiden), y es la música de Jo Yeong-wook. Pero, como el resto de apartados de la película, esta es una arista más. Otra es la estética, tan impresionante que contribuye significativamente al impacto general de la historia. Escenas tan intrincadas y bellamente filmadas que, en ocasiones, resulta asombrosa la capacidad del director surcoreano para reinventarse a sí mismo visualmente en cada nueva película que estrena.

Escena de La doncella (The Handmaiden) (2016)

Sin embargo, por ponerle alguna pega, sí que puedo decir que a veces la mirada masculina ensombrece alguna que otra escena de la película (a pesar de contar con la colaboración en el guión de la guionista Jeong Seo-Kyeong). Igual que en Old Boy los espectadores occidentales sufrieron un poco con la escena de la ingesta de un pulpo vivo, en La doncella (The Handmaiden), muchas espectadoras lesbianas y bisexuales notan que ciertas escenas, particularmente aquellas que involucran intimidad o la representación de ciertos actos sexuales, notan que están dirigidas desde una perspectiva masculina prácticamente adolescente, lo que puede resultar un poco discordante considerando el fuerte mensaje feminista de la película.

Escena de La doncella (The Handmaiden) (2016)

La estructura narrativa de la película es otro de los grandes puntos que la hacen tan especial. El ritmo y la edición de la película pueden resultar inicialmente confusos, pero te recomiendo seguir firme hasta el final, ya que los resultados te serán gratificantes. En serio, apuesto a que, en general, tu reacción al verla será pasar del escepticismo a la admiración a medida que avance la película. Sobre todo por la capacidad de la película para subvertir las expectativas y ofrecer una conclusión satisfactoria.

Escena de La doncella (The Handmaiden) (2016)

Por último, los temas de la película, la intrincada trama principal, que involucra personajes que se estafan entre sí, está llena de alicientes, siendo inteligente y atractiva. Además, la trama secundaria, mucho más romántica, acompaña perfectamente a la otra, desarrollándose en medio de este telón de fondo de engaño, añadiendo profundidad a los personajes y a la historia.

Rompenieves (Snowpiercer) (2013), de Bong Joon-ho

Escena de Rompenieves (Snowpiercer) (2013)

La premisa principal de Rompenieves (Snowpiercer), ambientada en un futuro distópico donde los restos de la humanidad sobreviven a bordo de un tren en perpetuo movimiento, fue algo realmente apreciado por su originalidad y profundidad alegórica en su estreno. Si bien, como ha pasado con otras películas dirigidas por Bong Joon-ho, hay quien le critica el exceso de obviedad en el mensaje. La división del tren en clases, que refleja la estratificación social, funciona como una poderosa metáfora del clasismo y la injusticia social. Este aspecto forma parte de todo el largometraje, aumentando en profundidad cuando cada escena termina por dibujar un paisaje que esconde un brillante comentario contemporáneo sobre todos estos temas.

Escena de Rompenieves (Snowpiercer) (2013)

La actuación de Chris Evans como protagonista es un momento destacado de su carrera como actor con carácter, dada la profundidad e intensidad de la misma. Su interpretación de un héroe reacio a serlo que lidera una rebelión contra el opresivo sistema de clases. Por su parte, también destaca la actuación de Tilda Swinton, representando un personaje con una figura extraña y autoritaria que añade un sabor único a la película. Tanto es así que, en la serie que ha hecho Netflix, no han sido capaz de replicar un personaje similar. Pero claro, estos dos actores destacan por ser una producción con mayoría de actores occidentales, pero los que hacen de la película algo mucho más personal y carismático son Song Kang-ho y Ko Ah-sung.

Aun así, puede que la planificación de las secuencias de acción y el estilo visual de la película sean los dos apartados más dignos de elogio. Vaya que sí: escenas de acción de primera categoría, inteligentes y que ofrecen entretenimiento para una audiencia amplia, a la vez que el mensaje quizás no tanto (viendo el éxito de las ultraderechas en el mundo). Todos estos elementos realzan la atmósfera tensa y claustrofóbica de la película, transmitiendo efectivamente la desesperación y el caos dentro del tren.

Escena de Rompenieves (Snowpiercer) (2013)

Sin embargo, aunque no para mí, desde el inicio algunas críticas han señalado el ritmo y la estructura narrativa de la película como posibles debilidades. Algunos describen el primer acto como lento o confuso, pero la mayoría está de acuerdo en que la película cobra impulso y se vuelve más atractiva a medida que avanza. La mezcla de apocalípsis, algo de humor absurdo y temas serios evita que nadie se aburra.

Curiosamente, algunas críticas comparan con humor Rompenieves (Snowpiercer) con películas como Un mundo de fantasía, debido a sus elementos fantásticos y alegóricos. Esta comparación subraya la capacidad de la película para combinar géneros y temas de una manera poco convencional. Eso, junto a ser visualmente impactante e invitar a la reflexión abordando temas como el clasismo y la injusticia social a través de una lente de ciencia ficción, la hacen única.

Escena de Rompenieves (Snowpiercer) (2013)

En definitiva, su combinación de acción, drama y narración metafórica me dejó una fuerte impresión cuando la vi en el cine. Para mí, nada de su ritmo y estructura narrativa me parecieron irregulares hasta el punto de ser dos partes criticables del película en el global.

Welcome to Dongmakgol (2005), de Bae Jong

Escena de Welcome to Dongmakgol (2005)

Welcome to Dongmakgol, dirigida por Bae Jong, es una película ambientada en la Guerra de Corea en un pueblo apartado y al margen del conflicto es conocida en muchos lugares de internet como la Amélie coreana, debido a su originalidad y a la personalidad de una de las protagonistas. La historia gira en torno a soldados del Norte y del Sur, así como a un piloto estadounidense, que se encuentran en Dongmakgol, una aldea cuyos residentes desconocen felizmente la guerra. Una premisa quizás no demasiado original, pero que funciona muy bien para un desarrollo inteligente y conmovedor que explora temas humanistas entre la guerra y la paz.

Escena de Welcome to Dongmakgol (2005)

Es así: la descripción que hace la película de lo absurdo de la guerra y la humanidad común que comparten los soldados, a pesar de sus diferentes lealtades, resulta conmovedora entre una variedad de escenas absurdas y extrañas y tensas circunstancias. La tensión inicial entre los soldados, que poco a poco se transforma en comprensión y camaradería, es un poderoso arco narrativo digno de ser destacado aquí para explicar por qué Welcome to Dongmakgol ocupa esta posición en la lista. La inocencia de los aldeanos y su enfoque simple e imparcial de la vida sirven como un marcado contraste con las complejidades y prejuicios del mundo exterior.

Escena de Welcome to Dongmakgol (2005)

Por eso es todo un acierto ser testigos de cómo los elementos cómicos de Welcome to Dongmakgol funcionan a la perfección como un aspecto importante de su encanto. El humor, que a menudo surge de los choques culturales e ideológicos entre los personajes, no siempre busca ser inteligente, pero siempre es entretenido y estimulante. De hecho, sin haber visto nunca nada más de Bae Jong, aquí demostró una gran capacidad al equilibrar los momentos alegres con un tema tan serio como el de la guerra. Todo un testimonio de su destreza como director y guionista.

Escena de Welcome to Dongmakgol (2005)

No puedo olvidarme de la partitura musical de Joe Hisaishi, a quien los seguidores de la animación japonesa conocerán por su habitual presencia en las bandas sonoras de las películas del Studio Ghibli. Como casi siempre en su carrera, aquí la música agrega una capa hermosa y emocional a la película, mejorando la experiencia visual general.

El clímax y la resolución de la película son particularmente impactantes, de una profundidad emocional y un mensaje sobre la inutilidad de la guerra que resulta conmovedor. Una combinación de surrealismo y realismo con un enfoque único y eficaz.

Parásitos (2019), de Bong Joon-ho

Escena de Parásitos (2019)

Recordada como la película que ganó el premio Oscar a la mejor película justo antes de los confinamientos vividos en medio mundo tras la llegada del Coronavirus en 2020, Parásitos volvía a retomar algunos de los temas favoritos de Bong Joon-ho (como has visto antes). La exploración de las disparidades de clases que empieza directamente desde el título de la película.

La realidad capitalista o, lo que es lo mismo, el marcado contraste entre la rica familia Park y la empobrecida familia Kim, va desarrollando una poderosa narración sobre las divisiones sociales y la desesperación que puede surgir de la pobreza extrema y de cómo los ricos se aprovechan de ello. Algo que funciona equilibradamente gracias a la fuerte presencia de humor negro junto a múltiples reflexiones sobre hasta dónde llegará la gente para escapar de la pobreza y la meritocracia existencial.

Escena de Parásitos (2019)

La estructura narrativa y el ritmo de Parásitos pasa sin problemas de una comedia negra a un drama emocionante, demostrando una vez más la destreza de Bong Joon-ho como cineasta. Los giros de la trama, particularmente en la segunda mitad de la película, son lo suficientemente impactantes y efectivos como para mantener a los espectadores interesados y nerviosos hasta el final.

Escena de Parásitos (2019)

La cinematografía y el diseño de producción, que ofrecen una representación visual de los mundos contrastantes de los ricos y los pobres, son claves. Especialmente la lujosa y espaciosa casa de la familia Park y el estrecho apartamento en el semisótano de la familia Kim, por lo eficaz que resulta a la hora de resaltar los temas de desigualdad y estratificación social de la película.

Las actuaciones de todos los actores, por otra parte, son espectaculares. Cada uno de ellos tiene una personalidad memorable. Es decir, todos los personajes están bien desarrollados y multidimensionales, y cada actor aporta profundidad y matices a sus papeles.

Escena de Parásitos (2019)

Resumiendo: Parásitos es una sátira mordaz y reveladora, que ofrece una mirada crítica a la dinámica de clases y privilegios sin perder ritmo como entretenimiento de masas. Una mezcla magistral de comentario social, suspense y humor negro. Una exploración del conflicto de clases, con una narración excepcional y actuaciones sólidas que la han convertido en una de las películas más destacadas del cine contemporáneo.

Hierro 3 (2004), de Kim Ki-duk

Escena de Hierro 3 (2004)

El ya fallecido (por Covid-19) –y poco antes de ello cancelado por acosador y abusador– Kim Ki-duk fue durante varios años uno de los cineastas más valorados del cine de autor moderno. Dentro de toda su filmografía, Hierro 3 es una de las películas que más ha resonado entre el público, más allá de géneros o gustos cinéfilos.

En este caso sí que sí, hablo de una película con una narración única, caracterizada por un diálogo mínimo y un enfoque mucho más centrado en la narrativa visual. Y, con estos mimbres, resulta cautivadora, sobre todo por la forma en que se desarrolla la historia casi en silencio, confiando en el poder de las imágenes y las sutiles interacciones entre los personajes. Este enfoque fue no sólo refrescante en su momento, sino también profundamente eficaz a la hora de transmitir los temas y emociones de la película a lo largo de todo el metraje, dando también pie a varias reflexiones sobre nuestro día a día en términos de posesión y propiedad.

Escena de Hierro 3 (2004)

Hierro 3 cuenta, de manera algo enigmática, el día a día de un joven que irrumpe en las casas de la gente mientras esta está fuera, no para robar, sino para vivir temporalmente en ellas. Su vida da un giro cuando se encuentra con una esposa maltratada en uno de estos hogares y forman un vínculo. A partir de ahí, la historia, a su modo poco convencional y original, explora temas como la soledad, la libertad y el deseo humano de conexión.

La relación entre los dos personajes principales es inolvidable sin importar cuántos años hace desde la última vez que la vi. Su vínculo, desarrollado sin mucha comunicación verbal, es tan convincente que los silencios sirven para dar aún más profundidad. El silencio entre ellos está lleno de significado y emoción, lo que hace que su conexión sea aún más poderosa.

Escena de Hierro 3 (2004)

La dirección de Kim Ki-duk es ampliamente aclamada por su visión artística y su capacidad de crear una narrativa elocuente a través de elementos mínimos. El uso del simbolismo en la película, en particular el motivo recurrente del palo de golf que da nombre a la película, destaca por agregar profundidad y capas a la historia. También porque la meticulosa composición visual de cada escena contribuye significativamente a la atmósfera y la narración general de la película. En particular por el uso de luces y sombras para realzar la calidad etérea y casi onírica de la película.

Escena de Hierro 3 (2004)

No te engaño, Hierro 3 es una obra maestra del cine del tedio, que destaca por su narración tranquila pero poderosa, y sobre todo es una de las películas coreanas más famosas en el ámbito del cine moderno de culto.

Decision to Leave (2022), de Park Chan-wook

Escena de Decision to Leave (2022)

Como ya habrás notado, tengo especial predilección por ciertos directores de cine coreano. Uno de los más importantes es, tanto para mí como a nivel general, el aclamado Park Chan-wook, a pesar de que aquí no ha salido su nombre tantas veces como muchos habrían podido esperar.

Esto se debe principalmente a que creo que su acercamiento a nuevos territorios (aunque ya transitados en el pasado) es mucho más fresca que en sus inicios, incluso visualmente, donde él siempre ha destacado como cineasta, pero cada vez es mejor en lo suyo, siendo el mejor en lo digital.

Escena de Decision to Leave (2022)

En Decision to Leave todo lo mencionado anteriormente queda claro desde el principio, como ya te conté cuando hablé de las mejores películas de 2022, con secuencias que mezclan con éxito romance, misterio y ciertas dosis de humor para contar la historia de un policía que investiga la sospechosa muerte de un hombre y su compleja relación con la esposa del fallecido, se ve como una narrativa convincente que entrelaza magistralmente elementos de un procedimiento policial con una conmovedora historia de amor.

Escena de Decision to Leave (2022)

La dirección de Park Chan-wook destaca por su belleza y la forma en que realza la atmósfera y el suspense Hitchcockiano de la película. incluyendo un uso de motivos visuales y simbolismo que agrega profundidad y capas a la historia de amor desde un punto de vista más cercano a la intriga.

Las actuaciones del elenco, en particular de Tang Wei y Park Hae-il, son perfectas, creando una química entre ellos que aumenta la tensión y el impacto emocional, saltando la pantalla para afectar también al sueño de los espectadores. Sus interpretaciones y sus interacciones son poderosas, emocionantes, complejas y llenas de matices.

Escena de Decision to Leave (2022)

La exploración de temas como la obsesión, el deseo y las complejidades morales del amor y el deber está tan estudiada y tan bien contada que nunca apabulla, aunque sí que dan ganas de verla de nuevo al acabar de verla por primera vez. Pero no solo es clave la profundidad con que afronta todos estos temas, también el humor y el ingenio que hay detrás de la forma de abordarlos, con sutiles elementos cómicos que brindan alivio en medio de los momentos más intensos de la película. Una combinación de géneros y tonos que ensamblan perfectamente.

Hill of Freedom (2014), de Hong Sang-soo

Escena de Hill of Freedom (2014)

Después de Kim Ki-duk, el otro gran nombre del cine de autor coreano es Hong Sang-soo. No podía hacer una lista de películas coreanas modernas sin contar con él, pero he elegido una de las menos destacadas por la mayoría de los críticos: Hill of Freedom.

Como autor y como película, cuando escribí sobre Hill of Freedom ya comenté que los temas y las escenas tenían muchos puntos en común con las obras anteriores del cineasta. Desde entonces, puede que su cine y sobre todo sus reflexiones hayan ido un paso más allá al contar con la presencia de Kim Min-hee y otros elementos de interés, nuevas reflexiones y una mayor madurez que tiende a expresar como cine dentro del cine, a través de la autoría y de las conversaciones entre cafés y cervezas.

Escena de Hill of Freedom (2014)

Aquí, para mí lo más importante de Hill of Freedom es la estructura narrativa de la película, que gira en torno a una serie de cartas leídas en un orden no cronológico, amplía las sensaciones habituales del cine de Hong Sang-soo con algo de intriga. Esta técnica de narración es un dispositivo inteligente que añade profundidad y complejidad a una película que es aparentemente todo sencillez. La forma en que se desarrolla la historia a través de estas letras dispersas permite una reflexión del tiempo y la memoria, dejando al público reconstruir la trama de una manera que imita la propia experiencia del protagonista.

Como suele ser normal en este autor, el amor, el anhelo y las barreras del idioma y la cultura son los temas centrales en la película. El protagonista, un japonés en Corea que busca a la mujer que ama, enfrenta estos desafíos en su búsqueda. Su limitada capacidad para comunicarse en inglés añade una capa adicional a la narrativa, enfatizando los temas de falta de comunicación y dislocación cultural.

Escena de Hill of Freedom (2014)

La dirección de Hong Sang-soo, como casi siempre, es ampliamente elogiada por su sutileza y minimalismo. La cinematografía simple pero efectiva de la película y las actuaciones naturalistas contribuyen a su tranquilo encanto. Este es el estilo característico del director, que incluye tomas largas y un enfoque en las interacciones cotidianas, con el que captura eficazmente los matices de las relaciones humanas.

El humor de la película, muy del gusto coreano, a menudo derivado de encuentros sociales incómodos y de los serios pero defectuosos intentos del protagonista de conectar con los demás, es elegante y discreto, mezlcado con momentos de melancolía que sirve para crear un tono agridulce.

Castaway on the Moon (2009), de Lee Hae-jun

Escena de Castaway on the Moon (2009)

Castaway on the Moon es una película que no cuadra demasiado con lo visto hasta ahora en esta lista, pero, como el resto, funciona y cautiva al público con la mezcla perfectamente medida de humor, romance y drama.

Con Castaway on the Moon aprendí que en Corea del Sur hacen simulacros de bombardeos cada cierto tiempo para que la población practique lo que debe hacer en caso de una alarma de guerra real. Más allá de eso, esta película va sobre un hombre abandonado en una isla en medio de un río de la ciudad y una mujer solitaria que lo observa desde su apartamento, destacando sobre todo por su originalidad, de un modo espiritual similar al de Welcome to Dongmakgol, pero completamente diferente.

Escena de Castaway on the Moon (2009)

Es, a su manera, una forma refrescante de tratar temas como el aislamiento y la conexión en el mundo moderno, sin olvidar la importancia de la salud mental en eso. El viaje del protagonista desde la desesperación hasta la búsqueda de un nuevo propósito en la vida en la isla es a la vez divertido, conmovedor e inspirador.

Destaca sobre todo la relación poco convencional entre los dos protagonistas, llena de detalles que son fundamentales para el encanto de la película. La transformación del protagonista masculino de un hombre desesperado que intenta escapar de su vida a alguien que acepta su nueva y más simple existencia es especialmente trascendente, dada la importancia que tienen ciertos temas en la cultura coreana, sobre todo en términos de éxito, objetivos y demás discursos ultracapitalistas.

Escena de Castaway on the Moon (2009)

De manera similar, el viaje de la protagonista femenina desde una persona recluida a alguien que encuentra una conexión con el mundo exterior a través de sus observaciones es esencial para elevar la película como algo más que una curiosidad graciosa sin más.

Porque, pese a lo que pueda parecer, en Castaway on the Moon prevalece el humor frente al drama, el desenfado frente a la trascendencia, a menudo derivados de lo absurdo de la situación del protagonista y sus ingeniosas formas de adaptarse a la vida en la isla. Este humor, junto con momentos de emoción genuina, crea un tono agridulce que resuena en muchos espectadores.

The Chaser (2008), de Na Hong-jin

Escena de The Chaser (2008)

The Chaser es una de las razones por las que el cine surcoreano tiene fama de ser el mejor fabricando thrillers intensos y exitosos con sus truculencias, personajes malvados y las venganzas derivadas de esto. En el caso de la película dirigida por Na Hong-jin, es un thriller crudo e intenso centrado en un ex detective convertido en proxeneta que busca frenéticamente a las mujeres prostitutas desaparecidas.

Escena de The Chaser (2008)

Una premisa inquietante y convincente que ofrece una persecución oscura y violenta de un asesino sádico, un retrato crudo e inquebrantable de la violencia y la desesperación con un estilo visual áspero que mantiene a los espectadores al borde de sus asientos, como también hicieron otras no mencionadas en esta lista hasta ahora como Encontré al diablo o, en menor medida Memories of Murder (Crónica de un asesino en serie) o Endemoniada.

Escena de The Chaser (2008)

Las actuaciones de Kim Yoon-seok y Ha Jung-wo como el proxeneta desesperado y el asesino en serie escalofriantemente tranquilo, respectivamente, hacen de la película una experiencia agotadora (desde un punto de vista positivo), dada la tensa atmósfera de la película y la sensación general de urgencia y temor. La dinámica entre estos dos personajes es un punto focal, con su juego del gato y el ratón impulsando la narrativa.

Escena de The Chaser (2008)

Por otra parte, también hay una reflexión latente a lo largo de la película sobre los fracasos y frustraciones del sistema judicial. Una crítica a las ineficiencias burocráticas y las ambigüedades morales que enfrentan quienes buscan justicia, convirtiéndola en algo más que un simple thriller.

Tren a Busan (2016), de Yeon Sang-ho

Escena de Tren a Busan (2016)

Tren a Busan fue, en su momento, un soplo de aire fresco para el género zombie, combinando elementos de terror tradicionales con otros de acción y grandes esfuerzos por emocionar al espectador. Porque, igual que la presencia de hachas, martillos y otras armas blancas es algo habitual en el cine coreano, el uso de niñas muy majas para hacerte sufrir y llorar también es muy frecuente. Aquí, aprovechando como escenario un tren de alta velocidad para aumentar la sensación de claustrofobia a la historia, así como la sensación de urgencia y suspense a lo largo de la película.

Escena de Tren a Busan (2016)

La película da comienzo cuando un padre que viaja con su hija descubre que está pasando algo raro de camino al tren que les llevará a Busan, donde les espera la madre. Dado que conocemos al personaje principal siendo un poco cretino, destaca lo bien que el director Yeon Sang-ho y el actor Gong Yoo trabajan el arco del protagonista y el desarrollo para convertir el viaje de un hombre de negocios egocéntrico en el viaje de una persona protectora desinteresada de manera convincente y desgarradora.

Escena de Tren a Busan (2016)

Entre tanta acción (mucho más destacada que la parte de terror) sobresalen cuestiones sociales, incluida la división de clases y el egoísmo en tiempos de crisis, lo que hace que la película no sólo sea entretenida sino también estimulante.

En cuanto a las secuencias de acción y la representación de los zombies, destacan por su intensidad, realismo y creatividad. La naturaleza trepidante e implacable de los zombies añade un elemento fresco y aterrador a la película y al género.

El hombre sin pasado (2010), de Lee Jeong-beom

Escena de El hombre sin pasado (2010)

El hombre sin pasado, también conocida coo The Man from Nowhere antes de que llegara a España, supuso un ligero descenso del nivel del thriller y el cine de venganza coreano, según los expertos. Sin embargo, para mí la película funcionaba y, vista ahora, ya era en sí misma casi un preludio de la saga de John Wick, intensa y apasionante, que combina elementos de acción, suspense y drama.

La película cuenta la historia de un misterioso y solitario dueño de una casa de empeño con un pasado oscuro, que se embarca en una búsqueda despiadada para salvar a una niña de una peligrosa banda criminal.

Escena de El hombre sin pasado (2010)

Dada la presencia prácticamente total del actor Won Bin como protagonista, destaca lo convincente de su personaje, siendo implacable a la vez que constantemente emocional con una interpretación de un personaje tranquilo pero letal que desata sus habilidades como asesino para proteger a la joven.

La conexión emocional entre su personaje y la niña, interpretada por Kim Sae-ron, agrega una capa de profundidad a la película, haciendo que las secuencias de acción sean más que visualmente impresionantes en términos de coreografía y ejecución (particularmente las peleas con cuchillos), sino también cargadas de emociones.

Escena de El hombre sin pasado (2010)

También es apreciable la exploración que hace la película de temas como la redención, la soledad y el impacto del pasado. Estos temas están entretejidos en la narración entre tanta violencia, añadiendo profundidad a los personajes y a sus motivaciones.

Pietà (Piedad) (2012), de Kim Ki-duk

Escena de Pietà (Piedad) (2012)

El director Kim Ki-duk perdió un poco de interés de la crítica en los últimos años de su carrera, quizás por haber perdido ese toque especial a la hora de contar historias, pero en Pietà (Piedad), recuperaba esa intensidad desgarradora de algunas de sus mejores obras, aquí centrada en la crueldad humana y la naturaleza compleja de las relaciones. En este caso, entre un usurero despiadado cuya vida da un vuelco por la aparición repentina de una mujer que dice ser su madre, desarrollando esa relación con un tono inquietante.

Escena de Pietà (Piedad) (2012)

Cho Min-soo y Lee Jung-jin cargan las tintas tanto que a veces duele ver el afecto maternal convertido en algo más siniestro, al ser una historia sobre la venganza, la redención y la capacidad humana tanto para el amor como para la crueldad, todas ellas características fundamentales para el impacto de la película, con imágenes crudas y a menudo violentas, usadas como un reflejo de la agitación interna de sus personajes y las duras realidades de sus vidas.

Escena de Pietà (Piedad) (2012)

A Bittersweet Life (2005), de Kim Jee-woon

Escena de A Bittersweet Life (2005)

A Bittersweet Life es considerado un thriller coreano menor, del mismo modo que Kim Jee-woon es considerado un cineasta coreano de nivel inferior a otros con mayor presencia en esta lista, a pesar de contar en su filmografía con títulos como El bueno, el malo y el raro, Dos hermanas o El imperio de las sombras.

Esta película, protagonizada por Lee Byung-hun, es, a diferencia de otros thrillers ya mencionados, una obra que destaca por una dirección elegante y con el dolor y la redención como objetivos principales. Cuenta la historia de Kim Sun-woo, un leal ejecutor de un jefe criminal, cuya vida se convierte en caos tras una decisión moral. Un punto de partida atractivo y emocionalmente bien explotado, combinando elementos de acción, drama y crimen.

Escena de A Bittersweet Life (2005)

La interpretación de Lee Byung-hun como Kim Sun-woo, un personaje frío y calculador, pero capaz de una profunda complejidad emocional, es posiblemente por la que sigue siendo recordado como parte estelar de los mejores elencos del cine coreano. Su transformación a lo largo de la película, de un ejecutor leal a un hombre en busca de venganza, puede servir como testimonio de su destreza actoral.

Escena de A Bittersweet Life (2005)

También en términos de coreografías y esfuerzo físico, no solo como actor, ya que la mezcla de violencia brutal y delicadeza estética en algunas escenas es parte esencial de todo el metraje para realzar la intensa atmósfera de la película. Puede que el estilo visual de A Bittersweet Life no llegue a los altares de otras películas, pero el uso de la iluminación, el color y la composición en la película contribuye a generar el estado de ánimo y tono general del personaje, lo que contribuye a la credibilidad de la historia.

Escena de A Bittersweet Life (2005)

En definitiva, A Bittersweet Life es una muestra más de cine magistral de acción, drama y crimen. Su convincente historia, sus sólidas actuaciones, particularmente de Lee Byung-hun, y sus impresionantes secuencias de acción la convierten en una película destacada de la cinematografía coreana.

A Moment to Remember (2004), de John H. Lee

Escena de A Moment to Remember (2004)

Pero basta ya de tanto thriller, porque también me gusta el drama y las películas de amor. Y ahí A Moment to Remember, dirigida por John H. Lee, es todo lo que uno podría pedir. Una historia de amor emocionalmente poderosa y trágica sobre una pareja joven, Sun-jin y Cheol-su, cuya relación se pone a prueba cuando a Sun-jin le diagnostican una forma rara de enfermedad de Alzheimer. Una historia desgarradora y tierna que captura la fragilidad y la fuerza del amor frente a la adversidad.

Escena de A Moment to Remember (2004)

Esta relación es presentada desde el inicio, por lo que sabemos cómo son antes de conocerse y asistimos al viaje de la pareja a través del amor inicial, la enfermedad y los desafíos inevitables que conlleva la enfermedad, destacando en ello su autenticidad y profundidad emocional a la hora de intentar hacernos llorar cada pocos minutos, a medida que el personaje femenino lucha contra la pérdida gradual de sus recuerdos y el personaje masculino lucha por no perderla a ella.

Escena de A Moment to Remember (2004)

En fin. Si te gustan las historias de amor dramáticas, esta película es perfecta para ti, al retratar las complejidades del amor y la pérdida de una manera convincente y sobre todo emocional, buscando todos los recovecos posibles para que lo pases mal a la vez que bien.

Broker (2022), de Hirokazu Kore-eda

Escena de Broker (2022)

Estrenada en 2022, Broker es una producción surcoreana dirigida por el japonés Hirokazu Kore-eda, por lo que priman los temas favoritos del cineasta, entre ellos la reflexión de las dinámicas familiares poco convencionales y las complejidades de las relaciones humanas en una historia que gira en torno a un grupo de personas involucradas en el mercado de adopciones ilegales, incluidos dos hombres que roban bebés del cajón de bebés de una iglesia, una joven madre que se une a ellos y las detectives que los siguen.

Escena de Broker (2022)

En esta película cabe señalar la presencia de grandes nombres del cine coreano, en particular de Song Kang-ho, Gang Dong-won y Bae Doona, esta última con una filmografía a la altura de la del primero de los mencionados. Su interpretación de personajes con profundas capas emocionales y motivaciones conflictivas destaca por su autenticidad y profundidad. De hecho, incluso entre los personajes que no interactúan nunca en la misma escena existe una química que aumenta el impacto emocional de la película.

Escena de Broker (2022)

Por otra parte, la dirección de Hirokazu Kore-eda es, como casi siempre, tranquila, amable y empática. Es decir, una dirección sutil, rica emocionalmente, pero sin excesos, para invitarnos a repensar sobre el significado de la familia, el amor y la redención con sensibilidad y realismo con una cuidadosa atención a los detalles.

Okja (2017), de Bong Joon-ho

Escena de Okja (2017)

Antes de petarlo con Parásitos, Bong Joon-ho ya había destacado como el director surcoreano más deseado por Hollywood, o al menos el más rápido a la hora de producir películas. También fue de los primeros en entrar en el mundo del streaming, generando en su momento mucha discusión sobre el papel del cine fuera de las salas y otras movidas que todavía siguen siendo cuestionadas. Todo eso ocurrió con Okja, una rareza que combinaba géneros alegremente, desde la aventura al drama, pasando por la sátira y la crítica social.

Social o con un objetivo claramente animalista, ya que en Okja la joven Mija hará todo lo posible para salvar a su mejor amigo, un súpercerdo genéticamente modificado llamado como la película, de una poderosa corporación multinacional que lo quiere trocear para vender por partes, unas para comer, otras para cenar.

Escena de Okja (2017)

En esta película volvemos a ver a Tilda Swinton colaborando con el director coreano (también a la niña protagonista) en un doble papel, dando realismo y complejidad a personajes que conviven con un mundo moralmente ambiguo. Y he aquí la actuación más destacada de Okja, por su profundidad y autenticidad, porque, en el otro lado, está la actuación de Jake Gyllenhaal, que destaca pero por ser demasiado exagerada.

Como en la mayoría de sus películas, Bong Joon-ho ataca la psicopatía neoliberal, en este caso la codicia corporativa, al tiempo que defiende los derechos de los animales y reflexiona sobre la ética del consumo de carne, manteniendo al mismo tiempo un sentido de fantasía y aventura. El estilo visual de la película, incluida la representación en CGI de Okja, se consideró en su momento impresionante y eficaz a la hora de transmitir el vínculo emocional entre Mija y su amigo animal.

Escena de Okja (2017)

En cualquier caso, aviso: los cambios de tono de la película, que van desde momentos alegres hasta escenas más oscuras e inquietantes, pueden ser un poco problemáticos según la sensibilidad del espectador. Sobre todo si te duele mucho ver a un animal sufrir, aunque sea un animal creado por ordenador digitalmente.

Secret Reunion (2010), de Jang Hoon

Escena de Secret Reunion (2010)

A partir de aquí, mi memoria sobre las películas que quedan es mucho menos fiable. Es verdad que tienen el 8 que les puse en su momento, pero tampoco uso los números como forma de recordar el cine que veo, aunque sí para volver a lo que vi y pensar en si lo volvería a ver o en si la marca que dejó en mi ser coincide con lo que sentí en aquel momento en que la vi.

Escena de Secret Reunion (2010)

Todo esto para introducir Secret Reunion, la película dirigida por Jang Hoon que, como tantas otras, mezcla acción, drama y elementos de una buddy movie (o película de amigos), para deleite de los seguidores de Song Kang-ho, que hace de un oficial de inteligencia de Corea del Sur que tiene que trabajar con un espía de Corea del Norte.

Escena de Secret Reunion (2010)

Song Kang-ho y Gang Dong-won consiguen la suficiente química como para hacer que la relación sea entretenida y dé más fuerza e interés a la película, ya que la relación y evolución de sus personajes proporciona tanto peso emocional como momentos de humor.

Lazos de guerra (2004), de Kang Je-kyu

Escena de Lazos de guerra (2004)

Para acabar, recomiendo Lazos de guerra, también conocida como Tae Guk Gi: The Brotherhood of War, una película bélica con la que Kang Je-kyu hace un retrato brutal de la Guerra de Corea, junto con una narrativa profundamente emotiva centrada en dos hermanos obligados a luchar en una guerra –metafóricamente– entre hermanos.

La historia de los dos hermanos, obligados a luchar en la guerra, con el mayor asumiendo peligrosas misiones para proteger al menor, funciona como película introductoria para espectadores jóvenes, de esas que podrían poner los profesores a sus alumnos para ayudarles a reflexionar sobre el dolor y el sinsentido de las guerras. En este sentido, la realista descripción que hace la película de los horrores de la guerra transmite de manera efectiva la tragedia y la brutalidad del conflicto.

Escena de Lazos de guerra (2004)

Destacan por su escala épica y su impactante ejecución las secuencias de acción y las escenas de batalla. Por otra parte, también debo señalar la capacidad de la película para equilibrar estas intensas escenas con el drama personal de los hermanos.

Escena de Lazos de guerra (2004)

Dicho lo cual, espero que este artículo con recomendaciones te interese y encuentres en alguna de las películas citadas un cine interesante que te aporte y te entretenga a partes iguales, ya sean dramas, thrillers, comedias, películas románticas o bélicas.

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