Si hay un grupo que haya llamado mi atención durante este año de forma tranquila y casi imperceptible en mi mente, ese ha sido San Fermin, el octeto musical de origen estadounidense liderado por los cantautores Ellis Ludwig-Leone y Charlene Kaye (tras abandono de Rae Cassidy), las voces más carismáticas de esta pandilla, amoldada la una a la otra en forma de coros y división del trabajo.
La referencia -bastante obvia- al nombre de esta banda pop (de cámara) me ha parecido una buena excusa para que hoy, día 7 de julio (San Fermín), me dispusiera a hablar sobre la misma, sobre todo teniendo en cuenta que hasta los propios miembros ya jugaron en el diseño de su anterior álbum, allá por 2013, con lo que debía de significar San Fermín para ellos… y no, no es una mujer enseñando los pechos ni gente bebiendo apilada: es un toro (que era la otra opción que quedaba junto con la de las cogidas). Casi nada.
El principal problema que tiene el pop barroco para mí, como amante de los ritmos rock hasta en su concepción más intimista y lenta, es que en conjunto me acaba dejando un poco indiferente o frío, así me ha pasado antes con bandas como Belle & Sebastian, Sufjan Stevens o The Divine Comedy, lo que no significa que no haya disfrutado alegremente y durante mucho tiempo con varios de sus temas y otros clásicos de los años 90. Ha pasado bastante tiempo desde que estas bandas vieron la luz, más incluso si consideramos los orígenes de este estilo, a mediados de los 80, cuando fue introducido dentro del género mochila “indie pop”. Este gusto personal se mantiene también aquí, lo cual no quita que sean más que recomendables como un todo. Se merecen un escucha global, al menos.
San Fermin, el grupo de música
El caso es que San Fermin publicó un nuevo álbum el 20 de enero de este año, se llama Jackrabbit y, aunque abandona al toro, continúa en la senda animal, como el propio título hará presagiar a muchos. Con San Fermin -su ópera prima- ya llamaron bastante la atención de muchos oyentes, obtuvieron una fama y un reconocimiento merecidos, sobre todo en su país, pero es ahora, con Jackrabbit, cuando parecen confirmar toda la calidad intuida o despejada hace dos años. Destacan, por encima del resto, Emily y Jackrabbit, no sólo agradables, sino plenamente duraderas; lo confirmo yo que las llevo escuchando desde hace 6 meses.
Saliendo del tema principal y siguiendo por el transversal, dudo que los miembros tengan mucho interés por San Fermín, me parece casi hasta mal expresarlo, pero ahí está y ahí se queda, quizá es que les gusta mucho el santo o creen que es el patrón de los animales, pero la realidad es que este párrafo es una excusa para que me quepa otra barra de Soundcloud y así podáis disfrutar de más temas de la banda -Sonsick, que me he alegrado de volver a escuchar- y más portadas de animales en Muros de absenta. Ah, por cierto: Vote por PACMA.
(Madrid, 1987) Escritor de vocación, economista de formación, melómano, cinéfilo y amante de la lectura, pero más bien amateur.